Diciembre de 2010, se acercaba la navidad, y con ella, el final de los Premios W de la pasada edición. La clasificación se encontraba muy apretada por arriba, ya que el dominio ejercido por Wanchope durante gran parte del año, se veía amenazado por el invierno estelar que se estaba marcando Vulkete, y ellos dos son los protagonistas de esta dulce historia.
Quedaban muy pocas jornadas en las que sumar, así que todos velaban armas en pos de hacer una última suma importante que les llevase a ganar algún puesto, sobre todo los dos primeros clasificados, Wanchope y Vulkete, que ponían en juego su amistad por ganar tan preciados premios.
Aquel día, miércoles de navidad, se empezó con el ritmo bodeguil muy temprano, y la noche y el alcohol, unieron a los dos primeros de la lista en fraternidad en busca de las necesarias bonificaciones femeninas.
Sobre las 4 de la noche, la colosal labia y su poderío físico, les llevo a buscar un triciclo, fallido, incomprensiblemente. Del que todavía siguen puliendo los fallos acontecidos. Eso no les mermo la moral de cara a lo que quedaba de noche, que como todos sabéis, es mucho, quedaba muchísima noche.
En bernardas, se quedaron solos, con la única compañía de Cecil, que también andaba buscando sus propias bonificaciones. Y cuando parecía que la noche no iba a dar más de sí, Wanchope se acerco a Vulkete, al ver que este, estaba hablando con una bella chincheta en un estado ebrio del cual, se podían aprovechar ambos.
“Eres muy guapo”
Le dijo la chincheta en Alemania a Vulkete.
“Si, se llama Carlos”
Interrumpió Wanchope.
“Y ella se llama señorita tirar de vereta y a tomar por culo, ven para aquí”
Dijo Vulkete mientras la empezaba a meter el morro.
Los 3, empezaron a comerse los morros entre magreos en una esquina del bar. Aquello duro poco, ya que la paciencia de Vulkete siempre ha brillado por su ausencia, así que la agarro y la dijo:
“Vente para aquí, que te vamos a dar lo tuyo y lo de tu prima”
Huyeron los 3 hasta un portal cercano, se habían olvidado de Cecil, pero ella de ellos no. En el portal, los congrios salieron a pasear en cosa de segundos, y la chincheta en Alemania hizo honor a su nombre y comenzó a tirar de vereta sin mediar palabra. El lugar no era nada alejado, y por tanto, pasaba mucha gente debido a la cercanía con la zona de fiesta, pudieron apreciar hasta a fieles seguidores de los Premios W grabando en video, e incluso, la señorita Cecil también estaba siendo espectadora de lujo, ya que se encontraba a pocos metros.
Aquello, freno las ansias de vereta de la señorita tirar de vereta, y junto con las constantes maldades de Vulkete, convertidas en insultos y cachetes, hizo que la señorita tirar de vereta huyese.
Esta actuación, llevo a Vulkete hacia el liderato, un lugar que ya no abandonaría, con la pena de no lograr echarla el premio en la cara, pero con la alegría de ganar el premio más importante, los Premios W.
Legen.....dariooo!! Pido uno!!!
ResponderEliminar